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Hoy queremos ampliar la información de una de nuestras publicaciones de Instagram. El día 27 de septiembre se celebró en Mieres o, más bien, se debería haber celebrado una bonita fiesta, cuya tradición proviene ya de hace siglos; pero, debido a la actual situación, no ha podido ser y todos esperamos poder volver a llevarla a cabo dentro de un año.
Como ya os hemos hablado ayer en nuestra cuenta de Instagram del bollo preñáo (producto de pan relleno solo de chorizo o también de bacon y huevo, en otra de sus versiones), no vamos a extender esta publicación mucho más con el fin de no aburriros; solamente queremos añadir que es típico subir con tortillas, filetes empanados, fiambre, empanadas y bollos preñaos hasta Insierto, lugar de clebración popular; aunque también todos los restaurantes del camino se llenan de visitantes y romeros. Cerca de la ermita se celebra la fiesta con actuaciones. Tristemente, en los últimos años vienen a darse botellones y, en ocasiones también, otro tipo de situaciones ajenas al ambiente festivo general.
Tras una empinada cuesta, como canta Víctor Manuel en su famosa canción La Romería, de 1969, luego daremos más referencias, se encuentra un pequeño santuario del siglo XVIII con una casa, en frente, llamada "Casa de La Novena" en el que se veneran desde hace siglos las imágenes de los gemelos, médicos, mártires y santos Cosme y Damián, conocidos por la gente de Mieres como "Los Mártires", debido a su condición en la Iglesia, de ahí el nombre que se le ha venido dando a esta celebración. Se trata de dos tallas de antigua madera policromada. Según fuentes consultadas, durante la invasión musulmana sus reliquias recalaron aquí, por lo que comenzó a rendírseles culto. En Google podéis encontrar diferentes imágenes de ellos; os recomendamos buscar al fotógrafo de la villa Juan Fernández Grela, encargado de poner el broche con su cámara a las diferentes fiestas del concejo.
El santuario cuenta con una zona porticada de construcción posterior, ya que data del siglo XIX y desde la explanada y alreredors se puede contemplar todo el valle.Como detalles os queremos comentar dos cosas: una, que la primera foto que se conserva, al menos fechada, es de finales de la década de 1880; y, otra, que los allí reunidos solemos pasar, cuando las condiciones lo permitían, un pañuelo sobre las imágenes con la fe de que después te ayudarán a quitar todos tus males.Si queréis obtener más información podéis informaros a través de la sección de patrimonio industrial del Ayuntamiento de Mieres.
En lo referente a la canción, podemos decir que nadie que sea de Mieres es incapaz de evitar una especie de escalofrío (para los asturianos y amigos: respigo) cuando la escucha y se le viene, de forma automática, a la mente recuerdos de la celebración entre amigos y en familia. A finales de octubre de 2019, el cantante mierense volvió para dar un concierto gracias a la Asociación Serondaya del pueblo de Cenera (véase la entrada acerca del Mercáu Astur), para regalar a sus seguidores una noche especial, debido al 50 aniversario del lanzamiento de este disco.
Para terminar, queremos explicar de forma breve lo que es una fiesta de prao para nosotros. Pues se trata, ni más ni menos, de una celebración, no urbana, en prados, ya puedan ser cercados o no, el que las personas se reúnen, como su nombre indica, para festejar un acontecimiento. Por lo general, suele haber artistas en solitarios, grupos u orquestas que amenizan una sesión vermú tras las tradicionales celebraciones religiosas o durante las tardes y noches. El nombre resulta bastante lógico dado el lugar en el que se llevan a cabo y nos gustaría saber si en el resto de España, o en el extranjero, tienen un nombre parecido. Así que queda todo el mundo invitado a comentar.
¡Nos vemos en la siguiente publicación!
(Por motivos de copyright hemos preferido no enlazar la portada del disco ni las citadas fotos del conocido fotógrafo, pero no son difíciles de encontrar).
Instagram: tomandouncafenasturias
